El desarrollo de nuevas tecnologías nos ha llevado a cambiar la percepción de las cosas, los avances tecnológicos que experimentamos día a día, han surgido tan rápidamente, que si nos ponemos a hacer memoria en pocos años hemos evolucionado radicalmente.
La ciencia siempre ha estado ahí, pero cada vez es más asombroso lo que los científicos descubren para llevar al mercado y facilitarnos las cosas en algunos casos o simplemente para tener un poco más de lujos y comodidades. Este es el caso de las pantallas planas de plasma, las cuales con años de investigación surgieron al mercado después de la aparición de las pantallas de LCD (Liquid Cristal Display) las cuales revolucionaron la forma y el espacio de nuestros televisores, de pasar a ser una televisión bastante ancha y en algunos casos estorbosa con un tubo de rayos catódicos y diferentes dispositivos electrónicos, que a su vez después de pasar muchas horas frente al televisor uno podía sufrir molestias por los rayos catódicos. Sin embargo ahora las podemos disfrutar con medidas de anchura bastante delgadas así como también tamaños mayores sin necesidad de mucho espacio, disfrutando así mismo de una mejor resolución de imagen y nitidez, evitando también las antiguas molestias de pasar mucho tiempo frente al televisor.
Las pantallas planas de plasma o también conocidas como PDP por su acrónimo en inglés (Plasma Display Panel) es una tecnología surgida en 1964 en la universidad de Illinois sin embargo no fue hasta 1997 cuando Pioneer comenzó a venderlas al público.
Las pantallas de plasma fueron las sucesoras de las pantallas de LCD y la principal competencia, ya que esta tecnología es preferible para tamaños 3 mayores de 40 pulgadas así mismo las pantallas de plasma tienen u mayor
ángulo de visión y es capaz de mostrar colores más reales por su tecnología, tomando en cuenta también que hay una mejor relación de tamaño/precio con su rival más cercano que sería la tecnología LCD.
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